El hiperrealismo de Susanne Wehmer
En su trabajo pictórico, Susanne Wehmer usa imágenes de su entorno cotidiano, prestadas de la sociedad de consumo de hoy.
Su pintura hiperrealista no transmite la realidad primaria, sino que habla de cómo esta realidad se nos transmite transformada por los medios de comunicación para evocar nuestro deseo. Por un lado, Susanne pone en evidencia los trucos utilizados por publicidad y diseño, pero al mismo tiempo utiliza justamente los efectos y la seducción de estas imágenes a su favor. De este modo crea un universo ambiguo, construido a través de una autoexploración pero utilizando los filtros y efectos de los simulacros de la cultura contemporánea.
Su lenguaje pictórico se puede considerar hiperrealista por el nivel de detallismo alcanzado. Las pinturas de Susanne son realizadas con la técnica tradicional al óleo con un médium de trementina y aceite de linaza, contraponiéndola con un soporte industrial como el metacrilato o el aluminio.
El resultado son cuadros pintados al óleo con una gran delicadeza y una superficie absolutamente lisa, logrando unos acabados satinados propios de las portadas de revista.
Con un trabajo minucioso, Susanne consigue acabados de un nivel de detalle extremo, evitando dejar cualquier rastro del pincel. Su pintura hiperrealista carece de textura y de referencias pictóricas como la tela o la pincelada para llegar a un resultado fotográfico, hiperreal.
Nos muestra primeros planos pintados con una técnica de exactitud minuciosa. En sus retratos de mujeres y nadadores se puede apreciar cada pelo, cada pestaña y cada brillo pintados con un preciosismo de orfebre, y los objetos pintados, aparentemente banales, se sacralizan convirtiéndose en iconos de nuestra vida cotidiana.
En su serie “Sweet Paintings”, Susanne muestra objetos triviales en pinturas perfectas, atrapando la luz con virtuosismo técnico. Reproduciendo el detalle de forma exacta a gran escala, la realidad sólo puede aprehenderse de modo fragmentario, más allá de lo real y rozando lo abstracto. De este modo recrea su universo cotidiano a través de la pintura añadiéndole su dimensión personal.
Susanne también realiza retratos hiperrealistas por encargo a base de fotografías enviadas.